Te despiertas varios minutos después en lo que parecía una vasta extensión de tela, miraste confundido sin saber dónde estaba así que caminante un poco para averiguar dónde estaba y después de unos minutos lograste percibir que esta era tu habitación, el lugar donde transitabas era tu cama solo con un tamaño enorme por lo que tu descubrimiento te paralizó.

 Estabas de un tamaño diminuto en tu gigantesca habitación, no tenias idea que había provocado esta transformación pero te sentias vulnerable en estos momentos.

 Para tu consternación sentías unos temblores que te helaba la sangre cuando viste abrirse la puerta y una colosal sombra ingreso en tu habitación. 

"Blaise estas aquí? Si tus ojos no lo vieran no lo creerían ante ti estaba Dolores, la señora del almuerzo estaba parada frente a ti. Su prominente tamaño te dejaba desconcertado así que hiciste todo lo posible para llamar su atención. 

 "Dolores estoy aquí abajo" gritaste con todas tus fuerzas para que ella te reconociera.

 "Eh? No lo puedo creer! Eres tu Blaise?" Pregunto con suma preocupación Dolores al poder distinguir tus pequeños gritos y para ti fue un alivio ya que pudo reconocerte. 

 Te recogió con su dedo y te elevo al nivel de sus ojos para observar mejor tu cuerpo pero para ti fue como estar en montaña rusa cuando te subieron. Tragaste un poco de saliva al ver los enormes ojos que te miraban como si fueras un insecto. 

 "Que fue lo que te paso?" Pregunto tratando de averiguar el porque de tu estado.

"Sinceramente no lo sé, sentí una descarga eléctrica como si fuera un rayo y desperté con este tamaño en mi habitación" Le explicaste con una risa por lo loco que sonaba esta discusión. 

 "Por cierto tía que haces en mi habitación?" Le preguntas algo confundido debido lo raro que ella estuviera aquí. 

"Claro lo había olvidado por esta situación, venia ver si mi querido Blaise quería pasar tiempo de calidad con su querida tía aunque con este tamaño debería llamar a tu madre y avisarle de este incidente" Dijo Dolores cuando saco su teléfono entre su pecho para llamar a tu madre y explicarle la situación.

 Mientras llamaba a tu madre Dolores te coloca en tu mesita de noche para poder hablar más tranquila y no querer molestarte con su conversación así que te sentaste para esperar la vuelta de Dolores. 

 Dolores volvió a la habitación y se dirigió a tu ubicación. "Hablé con tu madre pero para nuestra mala fortuna tendremos que esperar dos días para que ella llegue" Dijo Dolores con una leve molestia en su voz.

"Como que dos días?" Preguntas confundido. "Bueno a tu madre se le olvidó que esta en un viaje de negocio junto con alcaldesa y tu padre" Te comenzó a explicar los detalles de su conversación.

"Por otro lado tu hermana no estará aquí hasta dentro de una semana, así que tienes dos opciones para que te cuiden hasta que llegue tu madre" Dijo Dolores con un suspiro. "Puedo cuidarte yo en mi casa por estos dos días aunque solo seremos tu y yo ya que mis hijas no estarán en casa por esta semana o si tu quieres puedes ir a dejarte dónde Sheila" Te comentó Dolores dejándote con más dudas que certezas sobre su conversación con tu madre pero como no querías herir sus sentimientos y que gracias a ella tienes una esperanza de volver a tu tamaño normal decidiste la opción que era mejor para ti. 

 "No me molesta quedarme contigo Lolita" Dijiste ya que quedarte con Dolores era una opción más segura que la juguetona Sheila y con este tamaño minúsculo no querías estar cerca de la voluptuosa Sheila.

 Cuando dijiste esas palabras Dolores te acercó hacia sus labios y te dio un gigantesco beso antes de hablar. "Sin duda elegiste estar conmigo en estos dos días y te aseguro que pasaremos mucho tiempo de calidad" Te hablo con un tono sensual antes de empezar a bajar tu cuerpo y rodear su barriga para mostrarte una vista que aún no estabas preparado. 

 Ante ti estaba el inmenso trasero de Dolores que estaba siendo apretado por unos vaqueros que uno pensaría que estuviera a punto de estallar por sujetar unas masas tan enormes.

 "Blaise ahora que acordamos quien te iba a cuidar debemos ir a mi casa para estar más cómodos así que te pondré en mi bolsillo trasero pero no te preocupes estos bollos son tan suaves que no te provocarán daño alguno" Y con eso dicho Dolores te metió dentro de su bolsillo, sentías que todo tu cuerpo era apretado por una de sus nalgas pero por más extraño que era no te dolía nada de tu cuerpo y de repente sentías que las mejillas de Dolores se movían entre ellas dándole aviso que se disponía a su casa. 

 "Solo espera que lleguemos a mi casa querido, vamos a disfrutar muchos estos días hasta que llegue tu madre" Mencionó Dolores con una gran sonrisa por los repentinos acontecimientos y por lo que vendrá en los próximos momentos. 

 Que pasa a continuación?