Decides esperar unos minutos para moverte para no caer en una trampa de Lulú. Al salir del fondo del lavabo logras escuchar unos pasos que te congelaron en tu sitio. La puerta del cubículo se abrió revelando la increíble figura de Dolores.

Desde tu perspectiva apenas podría ver la cara de Dolores debido a sus abundantes pechos que tapaban tu visión.

"Uff... no debí comer ese burrito - Dolores soltó un pedo masivo que hizo temblar el suelo a su alrededor - Pero me salte el desayuno" Dolores dijo dando palmadas en su barriga.

"Debería liberar un poco de presión mientras hay clases" Dolores rápidamente soltó varios pedos rápidos.

Tenias que actuar rápido si quería la ayuda de Dolores pero al escuchar sus repentinas explosiones te hacían preguntar si era una buena opción.

Empezaste a gritar y mover los brazos para llamar la atención de Lolita pero era complicado ya que cada estruendo ahogaba tus gritos. Estabas tan ocupado llamando la atención que no te diste cuenta que Dolores había estado mirando tu minúscula figura en el suelo.

Dolores le parecía extraño ver un insecto tratando de llamar su atención. Con una mano agarró al insecto extraño para darle un mejor vistazo y lo que vio la hizo estremecer su cuerpo.

"Blaise de verdad eres tu? Preguntó sorprendida al ver tu cuerpo que estaba desaparecido desde ayer.

"Si Lolita! No se que me paso y desperté en este lugar" Le explicas la situación para obtener su ayuda.

"Oh cariño estaban todos preocupados por tu desaparición" Dolores te dio una sonrisa maternal que te alivió que ella te habría encontrado.

La mente de Dolores estaba llena de pensamientos sobre que hacer contigo pero por un lado quería sentir total control sobre tu pequeña figura. Ella pensaba que nadie más sabría de tu existencia lo que hizo que se perdiera en sus pensamientos sin escuchar tu pequeña voz.

"Tia estas bien? Preguntas confundido al no escuchar respuesta de la señora del almuerzo.

"Disculpa cariño estaba pensando en decirle a tu madre" Mintió para no revelar sus verdaderos sentimientos.

"Claro debería llamar a mi madre" Dijiste sin saber lo que te esperaba.

Dolores estaba en una encrucijada al no saber que hacer contigo pero lo que era claro que tenia que salir del baño sin levantar sospecha.

"Cariño tendrás que ser paciente antes de ver a tu madre porque no puedo abandonar mi trabajo pero te pondré en un lugar seguro" Dijo ella colocando tu cuerpo sobre un bolsillo de su delantal.

Dolores siguió con si día a día mientras te cuidaba sin levantar sospechas entre los maestros y alumnos. 

Dolores termina con su trabajo y regresa a su hogar...

Al ver la hora Dolores rápidamente se dirigió a su hogar cambiando de lugar a tu cuerpo entre sus pechos gigantescos.

"Vamos donde mi mamá? Preguntas al entrar en el vehículo de Dolores.

"Es una sorpresa cariño y creo que te va gustar" Se río sutilmente al pensar en sus opciones de diversión.

Al llegar a su hogar se dirigieron a su habitación mientras Dolores entraba al baño sin antes decirte unas palabras.

"Me voy a cambiar mientras tu espera acá. No quieres que vaya con mi uniforme de trabajo a ver a tu madre" Se río al cerrar la puerta pero tu no le diste importancia al tema debido a que pensabas que estarías bien con Dolores.

Después de un tiempo Dolores salio con un bikini absolutamente pequeño para su cuerpo lo que casi te provocaba un paro cardíaco al ver como su masivo trasero oscurecía tu entorno.

Intentas gritar pero rápidamente fuiste aplastado por Dolores que solo se río al sentir tus esfuerzos sobre una de su nalga planetaria.

"Vaya no te aplaste en absoluto" Dijo mientras hundía su trasero aún más en su cama. Por otro lado sentias una intensa presión agotando todo tu aire pero al igual que Lulú no era suficiente para matarte.

Estabas sorprendido por el cambio de actitud de Dolores pero te recordaste que con tu tamaño actual no hay nada que pudiera hacer. Solo esperabas que ella se levantara lo más rápido posible para preguntar porque hizo esta acción repentina.

Dolores se sentía en el cielo al mover continuamente su trasero sobre ti que no se dio cuenta de la explosión de su trasero.

"Discúlpame no tenia planeado tirarme un pedo sobre ti pero si fuiste capaz de soportar el peso de mi trasero no creo que un pequeño pedo sea tan malo" Se río al sentir tus luchas aun más agitada pero decidió levantarse para explicar que hacer contigo de ahora en adelante.

La presión finalmente se alivio dándote un poco de aire fresco pero no duró demasiado cuando dedos monoliticos te alcanzaron y te llevaron a la cara de Dolores. En estos momentos tu mente estaba tan destrozada que no te importa descargar tu rabia con alguien mucho mayor que tú.

"Dolores no es gracioso lo que hiciste quiero volver con mi mamá ahora" Gritabas enojado debido a los malos ratos que tuviste en estos días.

Dolores estaba sorprendida por como alguien mucho más pequeño que ella pudiera ser tan grosero sin mencionar que esa persona era el respetuoso hijo de su amiga y que nunca había hecho un berrinche de esta forma.

"Vaya alguien esta de mal humor pero eso se puede arreglar de forma inmediata" Dijo con una sonrisa que te dio escalofríos.

"Tranquilo Blaise porque de ahora en adelante seras mi pequeña mascota y si te portas bien serás recompensado pero si no obedeces creo que tendré que darte una lección" Dijo volviendo a colocar tu cuerpo en su cama.

Al igual que la vez anterior dejo caer su pesado trasero sobre ti pero esta vez estaba entre su grieta que emanaba un repulsivo olor por sus pedos anteriores.

"No te preocupes Blaise una vez haya corregido tu comportamiento serás una buena mascota" Dijo mientras se acomodaba en su cama hundiendo tu cuerpo más profundo en su grieta.

Estabas asustado por las pocas palabras que lograbas escuchar de Dolores pero no podria creer que ella decidiera convertirte en su mascota sin importar.

Dolores levantó levemente su trasero para volver a dejarlo caer una y otra vez durante algún tiempo.

Ella pensó que habías entendido tu posición así que se volvió a levantar para mirar a su cama pero no te vio por ningún lado. Sintió una lucha entre su grieta la que la hizo reír y decidió apretar sus nalgas para darte más castigo.

"Que desafortunado eres de caer en medio de estos bollos. Eres tan pequeño que podrías perderte si caes adentro pero por ahora eso esta descartado" Dijo mientras hurgaba en su trasero para sacar tu cuerpo.

"Ya que eres mi pequeña mascota debería darte unas ordenes para el día para mantenerte en forma" Dijo Dolores con voz soñadora al imaginar las cosas que te pediría.

"Que puedo hacer con mi tamaño actual? Apenas hablabas para recuperar el aire faltante a tus pulmones.

"Oh cariño no deberías subestimar tu cuerpo. Puedes hacer otra cosa" Dijo colocandote en su mesita de noche y sacar un pequeño cuaderno de un escritorio.

"Puedes darme un masaje completo en mi trasero una vez que llegue del trabajo" Dijo con voz lujuriosa al anotar en el cuaderno sus peticiones.

"Podría necesitar un buen cojín para el viejo sillón que hay en casa" A estas alturas estabas demasiado pálido para argumentar las peticiones de Dolores.

"Casi lo olvido hay veces que como comida mexicana y tengo gases terribles y creo necesitar un buen filtro para no apestar la casa" Se río al mencionar esa parte.

"Esas serian todas tus tareas diarias por el momento si se me ocurre otra lo anotare en este libro" Dijo guardando el libro en su escritorio para darse la vuelta hacia ti.

"Y si decido no hacerla? Preguntas temeroso al no ver salida en esta situación.

"Porque no lo harías? Si no quieres hacerme enojar y pasar un mes entero como parte de mi tanga te sugiero que cooperes" Dijo con total indiferencia al ver tu reacción.

Con eso dicho Dolores busco en la cocina un viejo frasco de pepinillos y prosiguió colocarte ahí.

"Esta será tu cama y para que no olvides mi olor te daré un regalo de bienvenida" Dijo colocando su trasero sobre el frasco para lanzar un pedo de 30 segundos y volver a colocar la tapa.

"Uff... he estado aguantando ese hace unos momentos pero no te preocupes habrán más de esos mañana" Dijo guardando el frasco en su escritorio para volver a hacer la cena para su familia.

En el interior del frasco estabas con arcadas al notar que el fétido aire no tenía donde escapar volviendo tu prisión en un sauna de vapores nocivos que te atormentaban.

Pequeñas lágrimas rodaban de tus mejillas en parte por el olor pero la verdadera razón era que no querías convertirte en la mascota de Lolita y abandonar tu vida anterior.

Apenas sin opciones tan solo te quedaba resignaste a esta nueva vida o intentar una manera de escapar y tratar de conseguir ayuda.

Que sucede a Continuación?